Para desarrollar esta parte me apoyaré en el libro de Oliviero Ponte di Pino (2000). Hace muchos años, la humanidad podía agruparse en dos grandes categorías. Así, en el libro chino de las transformaciones, el I Ching, se clasifica a los hombres en superior (el que practica los preceptos y las reglas del libro) y después a los demás, los que, por destino, están condenados a la rutina.
En la Biblia (Proverbios y Salmos), se mencionan dos grandes categorías humanas, el sabio y el necio.
Con el desarrollo de la sociedad, dos categorías no fueron suficientes para clasificar a la humanidad. Maquiavelo, en su muy famoso libro El Príncipe, clasifica a los hombres en tres categorías:
“Porque hay tres clases de cerebros, uno que comprende por sí mismo, otro que discierne por lo que se le dice y un tercero que no entiende ni por sí ni con la ayuda ajena, siendo el primero superior en todo, el segundo excelente y el tercero inútil (Maquiavelo, Nicolás, cap. 22)”.
Confucio hablaba de cuatro categorías: los que nacen dotados de una gran inteligencia; aquellos que han adquirido muchos conocimientos con esfuerzo y estudio; luego están los que, a pesar de haber dedicado mucho esfuerzo al estudio, poseen poco conocimiento y, finalmente, se encuentran aquellos que, careciendo de inteligencia y sin haberse esforzado por estudiar, permanecen toda su vida en la más absoluta ignorancia.
El historiador y crítico francés, Hyppolite-Adolphe Taine (citado por ponte di Pino, 2000, p. 74), en su ensayo De l’intelligence (1870), también establecía una clasificación de cuatro grupos. Cuatro especies de personas hay en el mundo: los enamorados, los ambiciosos, los observadores y los imbéciles; y los más felices son estos últimos.
Más recientemente, el italiano Carlo María Cipolla, historiador de la economía y escritor, en su Allegro ma non troppo, afirma que la humanidad se clasifica en cuatro clases (en Ponte di Pino, 2000):
1. Los desgraciados que sólo buscan el propio provecho y al final, en cambio, sus acciones acaban aprovechando a otros;
2. Los inteligentes, que obtienen ventajas para sí y para los otros;
3. Los bandidos, que sólo buscan su propio provecho;
4. Los estúpidos, que perjudican a todos, de forma imprevisible y a ciegas.
Otros aseguran, entre los cuales se encuentra Oliviero Ponte di Pino (2000), que no bastan esas cuatro categorías para comprender a la humanidad, y en el esfuerzo de clasificar a las personas en base a los grados de estupidez, hubo necesidad de crear los partidos políticos. Pareciera que éste, el de los partidos políticos, es el lugar preferido en el que se refugia la mayoría de individuos estúpidos. Desde entonces, los partidos políticos han crecido significativamente. Es que como dicen por todas partes: No hay ningún necio que no encuentre su compañero.
viernes, 20 de agosto de 2010
Existe una relación directamente proporcional entre el conocimiento del cerebro y el conocimiento de las posibilidades de desarrollo como individuos
La conducta humana está, en parte, determinada por leyes físicas, las mismas leyes que rigen totalmente la conducta del átomo De estos elementos, el biológico es, quizás, el más desconocido y es el objeto de la neurociencia con el estudio del cerebro. Es en el cerebro donde debemos buscar las causas fundamentales de este tipo de conductas y de todas las conductas; por eso, el cerebro debería ser objeto de estudio obligado de cualquier disciplina; de él depende, en última instancia, toda nuestra conducta, toda nuestra visión del mundo y toda actitud hacia la vida.
Quizás el mundo fuera distinto si conociéramos el funcionamiento del cerebro en interacción con el cuerpo. Existe una relación directamente proporcional entre el conocimiento del cerebro y el conocimiento de las posibilidades de desarrollo como individuos. En la medida que conozcamos más la organización y funcionamiento de nuestro cerebro y de nuestro sistema nervioso, estaremos más capacitados para conocer todas nuestras inmensas capacidades para desarrollarnos como especie humana. En él se encuentran las bases de nuestra agresividad, del odio, del amor, de la envidia, de la mediocridad, de la imbecilidad, en fin, de todas las pasiones humanas. No es cierto que, cuando nacemos, nuestro cerebro es como una tabla rasa (tanquam tabula rasa).
Los individuos, hombres y mujeres, poseemos distintas habilidades y esto nos hace diferentes unos a otros; no se trata de que unos sean superiores a otros, simplemente somos distintos. Cada persona hereda unas capacidades más desarrolladas que otras, y, por lo tanto, los resultados tendrán que ser distintos. Pensar que para tener éxito en la vida depende de la voluntad de las personas y de las oportunidades que se le presenten, es una forma de pensar poco seria.
En resumen, la conducta imbécil y mediocre es producto de la interacción de factores ambientales y genéticos; sin embargo, el entorno por sí mismo no actúa mecánicamente, sino que depende de cómo el individuo interiorice ese entorno; es decir, de cómo la persona interprete una experiencia determinada y esta interpretación dependerá del significado que el mismo sujeto le asigne, de forma consciente o inconsciente.
Quizás el mundo fuera distinto si conociéramos el funcionamiento del cerebro en interacción con el cuerpo. Existe una relación directamente proporcional entre el conocimiento del cerebro y el conocimiento de las posibilidades de desarrollo como individuos. En la medida que conozcamos más la organización y funcionamiento de nuestro cerebro y de nuestro sistema nervioso, estaremos más capacitados para conocer todas nuestras inmensas capacidades para desarrollarnos como especie humana. En él se encuentran las bases de nuestra agresividad, del odio, del amor, de la envidia, de la mediocridad, de la imbecilidad, en fin, de todas las pasiones humanas. No es cierto que, cuando nacemos, nuestro cerebro es como una tabla rasa (tanquam tabula rasa).
Los individuos, hombres y mujeres, poseemos distintas habilidades y esto nos hace diferentes unos a otros; no se trata de que unos sean superiores a otros, simplemente somos distintos. Cada persona hereda unas capacidades más desarrolladas que otras, y, por lo tanto, los resultados tendrán que ser distintos. Pensar que para tener éxito en la vida depende de la voluntad de las personas y de las oportunidades que se le presenten, es una forma de pensar poco seria.
En resumen, la conducta imbécil y mediocre es producto de la interacción de factores ambientales y genéticos; sin embargo, el entorno por sí mismo no actúa mecánicamente, sino que depende de cómo el individuo interiorice ese entorno; es decir, de cómo la persona interprete una experiencia determinada y esta interpretación dependerá del significado que el mismo sujeto le asigne, de forma consciente o inconsciente.
Este mundo repleto de imbéciles y mediocres
Dice Crick que nuestros cerebros altamente complejos y desarrollados no evolucionaron para descubrir las verdades científicas, sino simplemente para hacernos más inteligentes y cooperativos a fin de poder sobrevivir, reproducirnos y perpetuar la especie.
El mensaje que habrá que rescatar de todo esto es: no perdamos la esperanza, quizás vengan los tiempos en que en este mundo repleto de imbéciles y mediocres, de gente tan superficial y estúpida, la diversidad permita el surgimiento de hombres y mujeres excepcionales. Recordemos que: “Kepler nació de la copulación de un militar borracho y de una bruja. En su época, los psicóticos eran por lo general acusados de brujos. (...) La diversidad es un factor esencial de la evolución puesto que es la que permite las "mezclas" más variadas.(...) El progreso puede nacer de la diversidad de conceptos, de la diversidad de las soluciones originales ante un problema planteado. (Laborit, Henri, 1975)”.
Uno de los muchos consejos que el filósofo de Samos, ofrecía a sus alumnos era que no desesperaran ni desanimaran de la especie humana. Con el tiempo, el barro se convierte en mármol.
Por lo tanto, aún en este mundo tan vacío y estúpido, existe la esperanza que los individuos algún día cambiarán para desarrollar una vida distinta a la actual, en la que seamos más racionales, en la que existan menos imbéciles, en que la razón triunfe sobre la sin razón y seamos más responsables con nosotros mismos, como condición para ser responsables con los demás.
Y así como las estrellas alcanzan su final brillante al colapsar bajo la acción de su propia gravedad para crear nuevas estrellas y los elementos básicos (carbono y oxígeno) que dieron origen a la vida, así el ser humano alcanza su verdadera apoteosis cuando asume con responsabilidad sus acciones en todos los momentos de su vida, consciente de sus limitaciones y de la finitud de su existencia; pero, también consciente de que forma parte de una comunidad planetaria.
Ojalá, en un futuro no muy lejano, podamos repetir todos las palabras de Rabindranath Tagore:
No puedo elegir lo mejor.
Lo mejor me elige a mí.
Lo mejor no viene solo.
Viene con la compañía del Todo.
El mensaje que habrá que rescatar de todo esto es: no perdamos la esperanza, quizás vengan los tiempos en que en este mundo repleto de imbéciles y mediocres, de gente tan superficial y estúpida, la diversidad permita el surgimiento de hombres y mujeres excepcionales. Recordemos que: “Kepler nació de la copulación de un militar borracho y de una bruja. En su época, los psicóticos eran por lo general acusados de brujos. (...) La diversidad es un factor esencial de la evolución puesto que es la que permite las "mezclas" más variadas.(...) El progreso puede nacer de la diversidad de conceptos, de la diversidad de las soluciones originales ante un problema planteado. (Laborit, Henri, 1975)”.
Uno de los muchos consejos que el filósofo de Samos, ofrecía a sus alumnos era que no desesperaran ni desanimaran de la especie humana. Con el tiempo, el barro se convierte en mármol.
Por lo tanto, aún en este mundo tan vacío y estúpido, existe la esperanza que los individuos algún día cambiarán para desarrollar una vida distinta a la actual, en la que seamos más racionales, en la que existan menos imbéciles, en que la razón triunfe sobre la sin razón y seamos más responsables con nosotros mismos, como condición para ser responsables con los demás.
Y así como las estrellas alcanzan su final brillante al colapsar bajo la acción de su propia gravedad para crear nuevas estrellas y los elementos básicos (carbono y oxígeno) que dieron origen a la vida, así el ser humano alcanza su verdadera apoteosis cuando asume con responsabilidad sus acciones en todos los momentos de su vida, consciente de sus limitaciones y de la finitud de su existencia; pero, también consciente de que forma parte de una comunidad planetaria.
Ojalá, en un futuro no muy lejano, podamos repetir todos las palabras de Rabindranath Tagore:
No puedo elegir lo mejor.
Lo mejor me elige a mí.
Lo mejor no viene solo.
Viene con la compañía del Todo.
Nuestra comunicación con el Universo Inteligente. Factores clave de nuestra conexión ionogenomática y la percepción consciente. ¿Cómo podemos mejorar nuestro bienestar físico y espiritual?
Fuente: http://djxhemary.wordpress.com/2010/06/03/nuestra-comunicacion-con-el-universo-inteligente-factores-clave-de-nuestra-conexion-ionogenomatica-y-la-percepcion-consciente-%C2%BFcomo-podemos-mejorar-nuestro-bienestar-fisico-y-espiritual/
Junio 3, 2010 por djxhemary
Desde hace décadas, se conoce la relación existente entre los Rayos Gamma y nuestro ADN. En este sentido, nos remontamos a los estudios iniciados por el Físico Alemán W.O.Schumann en 1952.
La cuestión de la influencia entre las Resonancias Schumann (SR) y el cerebro humano, fue verificada posteriormente por el Dr.Michael König (1954), cuya Tesis Doctoral, versó precísamente sobre la relación exitente entre la conducta humana y dichas Resonancias, y posteriormente fue el Dr.Polk (1984) quien analizó detalladamente, la relación entre las tormentas solares y las Señales de Ultra-Baja Frecuencia (ULF).
Dichos espectros de ULF, interactúan de forma sistemática con el cerebro de los mamíferos, generando patrones de alteración de conducta en ellos, en la medida en que la Ionosfera cambia su composición Electromagnética. El hecho de que el ser humano sea consciente de este proceso, le permite interactuar de forma activa con las Resonancias, utilizando su dimensión mental.
Medición espectral realizada por Polk (1982), y realizada cerca de Kingston, Rhode Island, según el estudio realizado por Neil Cherry (2001) Por la Universidad Lincoln de Canterbury en Nueva Zelanda. La gráfica muestra el Pentabanda de las Resonancias Schumann.
1.-Nuestro cerebro actúa como una sofisticada antena de telecomunicaciones.
Nuestro cerebro opera satisfactoriamente utilizando señales oscilantes que son un millón de veces más pequeñas que el potencial de la membrana de las células. Los estudios de Neil (2001), detallan específicamente que el nivel de negociación electromagnética de las células se altera, ampliándose su espectro electromagnético, como si de receptores de señales se tratase. De hecho, los receptores de la membrana celular que tienen una ampitud de 10 5 V/cm interactúan con las ondas cerebrales, que tienen una amplitud de onda de 10-1 V/cm. Diversos experimentos reproducidos en laboratorio por Jenrow, Smith y Liboff (1996) demostraron que los seres humanos, reaccionamos a las señales de ULF, en diferentes rangos que van desde los 10- 7V/cm a 10-8 V/cm.
2.-El proceso de absorción de las RS y la negociación celular.
Originariamente, se pensaba que la negociación celular era una función independiente de otros procesos bioquímicos del organismo. Sin embargo, los últimos descubrimientos (Guerrero, Broers y Sang- Hoon Lee, Tsodyks y Markram, Jaffe, 2009-2010) en bioinformática, son claves en el proceso y han puesto de relieve la incuestionable coherencia interna de nuestro eficiente sistema neurotransmisor en el que se generan complejos procesos de producción y conexión de diferentes elementos químicos en las conexiones sinápticas tales como la Calmodulina, Serotonina, Glutamato, Litio (Li), Potasio (K), Sodio (Na) y el Calcio (Ca), que interactúan con las proteínas “qbits” y el ADN.
En el proceso de absorción continua de las Resonancias Schumann, juega un papel crucial el Ión de Calcio, que al estimularse de forma interna con las frecuencias generadas en la negociación,actúa como un superconductor y cambia la velocidad de transmisión de paquetes de datos “qbits” estimulando el Calcio como superconductor, e interactuando con la calmodulina y determinados codones de nuestro ADN, en función de nuestros estados de ánimo y emociones, consolidando de forma cuántica la información presente en las proteínas.
Dichos estímulos, juegan un papel crucial cuando son mantenidos a largo plazo, con una adecuada gestión de emociones que ejercen el papel de emisores-receptores en la comunicación, potenciando positiva o negativamente las transacciones.
2.1.-La Clave está en el Ión de Calcio.
Los iones de calcio Ca2+ tienen un papel fundamental en la regulación de la vida diaria de las células y en particular de las neuronas. La dinámica del calcio intracelular libre (en forma iónica) está controlada por una serie de procesos químicos y biofísicos, como la difusión y el enlace con diferentes receptores o proteinas, que actúan como almacenes de calcio o buffers, o como sensores de calcio que inician otros procesos celulares. Mientras que los buffers sólo se unen al Ca2+ por encima de una concentración crítica del mismo, y vuelven a liberarlo en el citoplasma cuando [Ca2+] se ha reducido por debajo de este valor crítico, algunas proteínas —como la calmodulina— cambian su estructura conformacional cuando se acoplan a iones de calcio (actúan como motores moleculares), para activar o modular enzimas, abrir o cerrar canales iónicos, o activar otras proteínas. Además, la [Ca2+] dentro de la célula, por ejemplo, produce la activación de ciertas corrientes iónicas de membrana como la IK(Ca) que es relevante para cierta plasticidad sináptica (facilitación) y clave en el proceso de absorción por el ADN.
El mecanismo de las reacciones biofísicas de absorción de las Resonancias Schumann, se encontró accidentalmente cuando se trataba de anaizar el efecto de éstas en el comportamiento de los Primates y los Seres Humanos al interactuar con los estímulos de las señales cerebrales. Se evidenció en el experimento que los rangos de frecuencias RS, alteraban significativamente los flujos de los Iones de Calcio en la transmisión celular. El experimento se realizó por primera vez en 1976, y fue repetido en diferentes laboratorios independientes, verificando los mismos resultados, hasta que se tomó como una evidencia científica en 1990 por Blackman. De hecho, Andrew Schwartz en la Universidad de Pittsburgh, acometía un experimento similar y obtuvo análogos resultados en 2002.
El efecto biofísico de modificación del ion de Calcio es consecuencia de la modulación de la frecuencia, y no de la intensidad de la señal, circunstancia ésta que evidencia una modificación por Resonancias, que genera reacciones no lineales en la negociación celular. Entendiendo por tales, emociones, estímulos y percepciones no sometidas a la dimensión espacio-temporal.
La absorción, genera efectos parecidos a la ingesta o inducción de determinadas sustancias externas, salvo que las producimos y controlamos mediante las emociones a nivel consciente.
Este hallazgo, explicaría muchos de los procesos autoinducidos de conexión con las realidades cuánticas, y en particular, explica de forma sistemática la canalización cuantica o conexión con las realidades trascendentes.
En los procesos de negociación, interactúan nuestras emociones, que de forma consciente actúan como un panel de control cuando suponen conductas continuas en el tiempo. La cuestión, reviste especial importancia ya que existe una especial correlación entre la relajación y el stress y los procesos de incremento de frecuencias en la inhibición/absorción de las resonancias Schumann.
El siguiente diagrama, muestra cómo la gestión de las emociones interactúa con la resonancia y los tiempos de negociación, generando diferentes estímulos-reacciones en el Hipotálamo y en la Amígdala:
Los diferentes estímulos, generan escenarios que oscilan entre la inhibición absoluta de la regeneración neuronal a la capacidad de autoregeneración de las neuronas, tanto en el hipotálamo como en la amígdala. Estos resultados son coherentes con los obtenidos por Andrew Schwartz y contrastados por Tsodyks y Markram en 2007.
2.2.-La síntesis de las proteínas por el ADN.
Todos los procesos de negociación neuronal anteriormente descritos, culminan en la síntesis de las proteínas. La activación y absorción del Litio (Li) es clave en este proceso y dicha sustancia se produce de forma natural por nuestro organismo en los estados próximos a la relajación cerebral. En los casos en los que el individuo manifiesta de forma prolongada ciclos cerebrales próximos al alfa (No superiores a 13 ciclos por segundo), hiperactiva los sensores cerebrales del hipotálamo interactuando con la amígdala, y activando así la glándula pineal que gestiona los procesos de arranque de la percepción y atención.
La meditación, la creatividad, la oración, etc. actúan como generadores de la gestión de emociones, y con el tiempo activan el proceso de absorción del Litio, así como liberando el potasio y reequilibrando el sodio en la transacción neuronal. La generación de pensamientos, emociones afectivas y positivas hacia los demás, retroalimenta el proceso, hasta el punto de modificar el ion de calcio incrementando las transacciones de paquetes de datos, los “qbits”.
El reciente hallazgo del calcio como superconductor bajo los estímulos de las resonancias electromagnéticas, en abril de 2010, es coherente con el experimento verificado por Oganov, Yanming Ma, Ying Xu en el que utilizando en un laboratorio difracción de ondas electromagnéticas, consiguen estimular los iones de calcio y catalogarlo como el mejor superconductor conocido hasta el momento.
Figura: A la izquierda el Calcio en estado normal. A la derecha la estructura excitada del Calcio por radiofrecuencia.
Sin duda, este hallazgo explicaría la interacción ya expuesta por Hameroff y Watt, respecto a la relación Ca-Calmodulina, y verifica empíricamente la posibilidad de alcanzar las velocidades transaccionales de 10 a100/ms en un nanosegundo, algo que únicamente puede conseguirse con un proceso de convergencia contínua con las Resonancias Schumann.
En 1997, un grupo de investigadores de la Universidad de Rochester, dirigidos por Kool y Guckian, pusieron de manifiesto los resultados de sus experimentos de replicación “in vitro” en los que en lugar de timina (T), utilizaban un nucleósido con una base análoga, el difluorotolueno (F).
Curiosamente, el difluorotolueno, no forma facilmente enlaces de hidrógeno, pese a tener la misma forma que la timina. El resultado fue sorprendente: La replicación fue posible, de forma que verificaron que los enlaces de hidrógeno, no eran decisivos para la replicación..
Sin embargo, las modificaciones aplicadas por Kool y Guckian consiguieron poner de relieve, que la clave de la correcta replicación de la estructura, se conseguía por resonancia magnética nuclear de una doble hélice de ADN que contenía el par A-F.
De hecho, Kool muestra la eficiente replicación de un análogo apolar de adenina, el 4-metilbenzimidazol (Z), con el análogo apolar de timina (F). En este proceso, la formación de enlaces de hidrógeno es casi imposible, y la replicacion fue más rápida que con los pares de (A-T), (C-G) tradicionales.
Por tanto la explicación hay que buscarla en la Resonancia Magnética y las estructuras iónicas de determinados elementos que actúan como superconductores al ser expuestos a ésta y ya sabemos que el Calcio lo es.
2.3.-El efecto cuántico de las proteínas en el ADN.
Todo lo anterior implica que existe una retroalimentación entre la emisión-recepción y por tanto, las Resonancias Schumann, interactúan igualmente desde dentro hacia fuera. Desde la conciencia hacia la negociación celular y el ADN.
Esta coherencia supone la capacidad de superposición cuántica de ciertas proteinas y al mismo tiempo, explicaría el esquema del desbloqueo de los codones de ADN, realizado por Yumi Kawazoe, Masahito Yamamoto en 2001.
Adicionalmente, tendríamos que:
2.3.-El efecto cuántico de las proteínas en el ADN.
Todo lo anterior implica que existe una retroalimentación entre la emisión-recepción y por tanto, las Resonancias Schumann, interactúan igualmente desde dentro hacia fuera. Desde la conciencia hacia la negociación celular y el ADN.
Esta coherencia supone la capacidad de superposición cuántica de ciertas proteinas y al mismo tiempo, explicaría el esquema del desbloqueo de los codones de ADN, realizado por Yumi Kawazoe, Masahito Yamamoto en 2001.
El esquema implicaría el siguiente proceso:
Adicionalmente, tendríamos que:
Aplicamos las fuerzas de acoplamiento dipolar entre las nubes de electrones de los átomos adyacentes o grupos moleculares. (Efecto Van Der Waals).
Y, por tanto, el modelo encaja con los experimentos de Kool y Guckian, en la medida que verificamos el nexo de enlace con la lógica del Ca, tal y como ya vimos en el enlace con el ión de Calcio, proteínas y su almacenamiento.
Por tanto la relación de almacenamiento de las proteínas sería la siguiente:
En el modelo, el Qbit, constituye por superposición el acoplamiento bipolar.
Y en efecto, la calmodulina y el calcio interactúan intercambiando cargas electromagnéticas. En este punto, la interacción de las estructuras integra moléculas complejas de aminoácidos aromáticos que replican y consolidan los paquetes de información, actuando como auténticos aceleradores de información, o semiconductores.
Las modificaciones de nuestro ADN no sólo pueden ser negativas como acostumbramos a leer en las publicaciones farmacéuticas: “Crecimiento de tumores y proliferación de virus”, sino también positivas: “Inversión de los procesos de enfermedad y estados de hipersalud e hiperlucidez.” Las emociones y su estudio, interactúan claramente en estos procesos, mediante la regulación consciente de los ciclos cerebrales. Las emociones positivas y/o negativas mantenidas en el tiempo, afectan sin duda alguna a nuestro bienestar físico y a largo plazo determinan nuestra configuración genética.
3.-¿Cómo podemos mejorar nuestra salud física y espiritual?
Tenemos la capacidad y la responsabilidad de generar bienestar a los que nos rodean aprendiendo a gestionar nuestras emociones de forma positiva.
El factor emocional es clave en la salud física, mental y espiritual. Una alimentación equilibrada y rica en nutrientes es excepcional para sentirnos bien con nosotros mismos y con los que nos rodean al igual que el ejercicio físico.
Pero igualmente debemos reflexionar sobre algunos hábitos automatizados que nos impiden la gestión satisfactoria de nuestros sentimientos más profundos. En este sentido, generar actitudes proactivas basadas en la reflexión positiva, la amabilidad, las buenas maneras, la asertividad y la espiritualidad, nos permiten activar con la constancia y el tiempo muchas de las funciones y aptitudes que permanecen dormidas en nuestro ADN.
La meditación nos ayuda a relajar los ciclos cerebrales, pero debe ir acompañada de una profunda convicción de nuestro ser como perteneciente a un Universo inteligente del que formamos parte. Es esa aceptación de la trascendencia, la que nos da accceso a la armonía.
Automatizar conductas negativas no es sano, y menos, dejarse abatir por sensaciones de negatividad o decepción. Biofísicamente, tenemos la capacidad de reconciliarnos con nosotros mismos, tomando la responsabilidad activa de la creación que es muchísimo más estimulante y sana.
El Yoga, la música, el contacto con la naturaleza y otras actividades como el deporte, son instrumentos que nos facilitan la comunicación con nuestro ser de luz. Cualquier método nos ayuda en ese sentido, siempre que no olvidemos cuál es el objetivo de nuestra existencia: Alcanzar la felicidad. Lo que científicamente estamos en condiciones de afirmar, es que existe una clara relación entre la correcta gestión de las emociones, el amor, entendido como servicio al otro y la salud, tanto física como espiritual. El estudio de los patrones de la música, los armónicos, las resonancias y las frecuencias, son claves como herramienta de trabajo.
La Psicología Cuántica Diferencial, tiene por finalidad enseñar al individuo a generar sus propios medios de resonancia con el Universo, reduciendo al máximo su dependencia de agentes externos, adicciones y automatismos insanos. La toma de conciencia del yo reconciliado con su ser de luz y feliz, es la clave de la evolución espiritual y requiere un trabajo personal que conlleva la mayor de las recompensas: La activación plena de la conciencia y la gestión eficiente del ser: Aprender a pensar, aprender a sentir y como consecuencia, aprender a comunicarnos con nosotros mismos, con los que nos rodean y con el Universo.
En el Congreso de Radiofrecuiencia y Universo Inteligente que celebrará el IRCAI el próximo día 3 de Julio en Alicante, expondremos detalladamente por primera vez una aproximación empírica transdisciplinar al estudio de la conciencia y presentaremos los últimos descubrimientos desde el análisis de las Resonancias Schumann hacia el ser humano: La relación existente con un rango diferencial de estas Resonancias, que tanto desde la Ionosfera, como desde el individuo, nos conectan con el Universo desencadenando desde dentro de éste, procesos coherentes de negociacion celular, genéticos, bioquímicos que son gestionados mediante las emociones con implicaciones en nuestra conducta, nuestra salud y nuestro proceso espiritual.
Autor: Dr.Rafael López-Guerrero.
Research Director IRCAI.(Instituto Radiofrecuencia Cuántica Avanzada Internacional).http://www.ircai.eu
Bibliografía Recomendada:
1.-Las Bases Científicas del Diferencial König-Guerrero: La Relación Ionogenomática y las Resonancias Schumann. Radiofrecuencia Cuántica Diferencial y análisis de los procesos biofísicos de la conciencia. López-Guerrero,Rafael, Dieter Broers Ernst, Betés de Toro,Mariano, Cahue Gamo,Mila. IRCAI-Departamento de Radiofrecuencia, Neurociencia, Biofísica y Psicología. IRCAISCIC20100703RLG. Junio 2010, Instituto de Radiofrecuencia Cuantica Avanzada Internacional.IRCAI.SL).
3.-El error de Descartes: Damasio, Antonio: La emoción,la razón y el cerebro humano: ISBN:84327876
4.- A mathematical model of agonist-induced propagation of calcium waves in astrocytes. Authors: Roth BJ , Yagodin SV , Holtzclaw L (ISSN: 0143-4160) (ESSN: 1532-1991)[1995 Jan; Volume: 17 (Issue: 1 )].
fuente:Misterios de la Astrofísica.starwiver
La cuestión de la influencia entre las Resonancias Schumann (SR) y el cerebro humano, fue verificada posteriormente por el Dr.Michael König (1954), cuya Tesis Doctoral, versó precísamente sobre la relación exitente entre la conducta humana y dichas Resonancias, y posteriormente fue el Dr.Polk (1984) quien analizó detalladamente, la relación entre las tormentas solares y las Señales de Ultra-Baja Frecuencia (ULF).
Dichos espectros de ULF, interactúan de forma sistemática con el cerebro de los mamíferos, generando patrones de alteración de conducta en ellos, en la medida en que la Ionosfera cambia su composición Electromagnética. El hecho de que el ser humano sea consciente de este proceso, le permite interactuar de forma activa con las Resonancias, utilizando su dimensión mental.
Medición espectral realizada por Polk (1982), y realizada cerca de Kingston, Rhode Island, según el estudio realizado por Neil Cherry (2001) Por la Universidad Lincoln de Canterbury en Nueva Zelanda. La gráfica muestra el Pentabanda de las Resonancias Schumann.
1.-Nuestro cerebro actúa como una sofisticada antena de telecomunicaciones.
Nuestro cerebro opera satisfactoriamente utilizando señales oscilantes que son un millón de veces más pequeñas que el potencial de la membrana de las células. Los estudios de Neil (2001), detallan específicamente que el nivel de negociación electromagnética de las células se altera, ampliándose su espectro electromagnético, como si de receptores de señales se tratase. De hecho, los receptores de la membrana celular que tienen una ampitud de 10 5 V/cm interactúan con las ondas cerebrales, que tienen una amplitud de onda de 10-1 V/cm. Diversos experimentos reproducidos en laboratorio por Jenrow, Smith y Liboff (1996) demostraron que los seres humanos, reaccionamos a las señales de ULF, en diferentes rangos que van desde los 10- 7V/cm a 10-8 V/cm.
2.-El proceso de absorción de las RS y la negociación celular.
Originariamente, se pensaba que la negociación celular era una función independiente de otros procesos bioquímicos del organismo. Sin embargo, los últimos descubrimientos (Guerrero, Broers y Sang- Hoon Lee, Tsodyks y Markram, Jaffe, 2009-2010) en bioinformática, son claves en el proceso y han puesto de relieve la incuestionable coherencia interna de nuestro eficiente sistema neurotransmisor en el que se generan complejos procesos de producción y conexión de diferentes elementos químicos en las conexiones sinápticas tales como la Calmodulina, Serotonina, Glutamato, Litio (Li), Potasio (K), Sodio (Na) y el Calcio (Ca), que interactúan con las proteínas “qbits” y el ADN.
En el proceso de absorción continua de las Resonancias Schumann, juega un papel crucial el Ión de Calcio, que al estimularse de forma interna con las frecuencias generadas en la negociación,actúa como un superconductor y cambia la velocidad de transmisión de paquetes de datos “qbits” estimulando el Calcio como superconductor, e interactuando con la calmodulina y determinados codones de nuestro ADN, en función de nuestros estados de ánimo y emociones, consolidando de forma cuántica la información presente en las proteínas.
Dichos estímulos, juegan un papel crucial cuando son mantenidos a largo plazo, con una adecuada gestión de emociones que ejercen el papel de emisores-receptores en la comunicación, potenciando positiva o negativamente las transacciones.
2.1.-La Clave está en el Ión de Calcio.
Los iones de calcio Ca2+ tienen un papel fundamental en la regulación de la vida diaria de las células y en particular de las neuronas. La dinámica del calcio intracelular libre (en forma iónica) está controlada por una serie de procesos químicos y biofísicos, como la difusión y el enlace con diferentes receptores o proteinas, que actúan como almacenes de calcio o buffers, o como sensores de calcio que inician otros procesos celulares. Mientras que los buffers sólo se unen al Ca2+ por encima de una concentración crítica del mismo, y vuelven a liberarlo en el citoplasma cuando [Ca2+] se ha reducido por debajo de este valor crítico, algunas proteínas —como la calmodulina— cambian su estructura conformacional cuando se acoplan a iones de calcio (actúan como motores moleculares), para activar o modular enzimas, abrir o cerrar canales iónicos, o activar otras proteínas. Además, la [Ca2+] dentro de la célula, por ejemplo, produce la activación de ciertas corrientes iónicas de membrana como la IK(Ca) que es relevante para cierta plasticidad sináptica (facilitación) y clave en el proceso de absorción por el ADN.
El mecanismo de las reacciones biofísicas de absorción de las Resonancias Schumann, se encontró accidentalmente cuando se trataba de anaizar el efecto de éstas en el comportamiento de los Primates y los Seres Humanos al interactuar con los estímulos de las señales cerebrales. Se evidenció en el experimento que los rangos de frecuencias RS, alteraban significativamente los flujos de los Iones de Calcio en la transmisión celular. El experimento se realizó por primera vez en 1976, y fue repetido en diferentes laboratorios independientes, verificando los mismos resultados, hasta que se tomó como una evidencia científica en 1990 por Blackman. De hecho, Andrew Schwartz en la Universidad de Pittsburgh, acometía un experimento similar y obtuvo análogos resultados en 2002.
El efecto biofísico de modificación del ion de Calcio es consecuencia de la modulación de la frecuencia, y no de la intensidad de la señal, circunstancia ésta que evidencia una modificación por Resonancias, que genera reacciones no lineales en la negociación celular. Entendiendo por tales, emociones, estímulos y percepciones no sometidas a la dimensión espacio-temporal.
La absorción, genera efectos parecidos a la ingesta o inducción de determinadas sustancias externas, salvo que las producimos y controlamos mediante las emociones a nivel consciente.
Este hallazgo, explicaría muchos de los procesos autoinducidos de conexión con las realidades cuánticas, y en particular, explica de forma sistemática la canalización cuantica o conexión con las realidades trascendentes.
En los procesos de negociación, interactúan nuestras emociones, que de forma consciente actúan como un panel de control cuando suponen conductas continuas en el tiempo. La cuestión, reviste especial importancia ya que existe una especial correlación entre la relajación y el stress y los procesos de incremento de frecuencias en la inhibición/absorción de las resonancias Schumann.
El siguiente diagrama, muestra cómo la gestión de las emociones interactúa con la resonancia y los tiempos de negociación, generando diferentes estímulos-reacciones en el Hipotálamo y en la Amígdala:
Los diferentes estímulos, generan escenarios que oscilan entre la inhibición absoluta de la regeneración neuronal a la capacidad de autoregeneración de las neuronas, tanto en el hipotálamo como en la amígdala. Estos resultados son coherentes con los obtenidos por Andrew Schwartz y contrastados por Tsodyks y Markram en 2007.
2.2.-La síntesis de las proteínas por el ADN.
Todos los procesos de negociación neuronal anteriormente descritos, culminan en la síntesis de las proteínas. La activación y absorción del Litio (Li) es clave en este proceso y dicha sustancia se produce de forma natural por nuestro organismo en los estados próximos a la relajación cerebral. En los casos en los que el individuo manifiesta de forma prolongada ciclos cerebrales próximos al alfa (No superiores a 13 ciclos por segundo), hiperactiva los sensores cerebrales del hipotálamo interactuando con la amígdala, y activando así la glándula pineal que gestiona los procesos de arranque de la percepción y atención.
La meditación, la creatividad, la oración, etc. actúan como generadores de la gestión de emociones, y con el tiempo activan el proceso de absorción del Litio, así como liberando el potasio y reequilibrando el sodio en la transacción neuronal. La generación de pensamientos, emociones afectivas y positivas hacia los demás, retroalimenta el proceso, hasta el punto de modificar el ion de calcio incrementando las transacciones de paquetes de datos, los “qbits”.
El reciente hallazgo del calcio como superconductor bajo los estímulos de las resonancias electromagnéticas, en abril de 2010, es coherente con el experimento verificado por Oganov, Yanming Ma, Ying Xu en el que utilizando en un laboratorio difracción de ondas electromagnéticas, consiguen estimular los iones de calcio y catalogarlo como el mejor superconductor conocido hasta el momento.
Figura: A la izquierda el Calcio en estado normal. A la derecha la estructura excitada del Calcio por radiofrecuencia.
Sin duda, este hallazgo explicaría la interacción ya expuesta por Hameroff y Watt, respecto a la relación Ca-Calmodulina, y verifica empíricamente la posibilidad de alcanzar las velocidades transaccionales de 10 a100/ms en un nanosegundo, algo que únicamente puede conseguirse con un proceso de convergencia contínua con las Resonancias Schumann.
En 1997, un grupo de investigadores de la Universidad de Rochester, dirigidos por Kool y Guckian, pusieron de manifiesto los resultados de sus experimentos de replicación “in vitro” en los que en lugar de timina (T), utilizaban un nucleósido con una base análoga, el difluorotolueno (F).
Curiosamente, el difluorotolueno, no forma facilmente enlaces de hidrógeno, pese a tener la misma forma que la timina. El resultado fue sorprendente: La replicación fue posible, de forma que verificaron que los enlaces de hidrógeno, no eran decisivos para la replicación..
Sin embargo, las modificaciones aplicadas por Kool y Guckian consiguieron poner de relieve, que la clave de la correcta replicación de la estructura, se conseguía por resonancia magnética nuclear de una doble hélice de ADN que contenía el par A-F.
De hecho, Kool muestra la eficiente replicación de un análogo apolar de adenina, el 4-metilbenzimidazol (Z), con el análogo apolar de timina (F). En este proceso, la formación de enlaces de hidrógeno es casi imposible, y la replicacion fue más rápida que con los pares de (A-T), (C-G) tradicionales.
Por tanto la explicación hay que buscarla en la Resonancia Magnética y las estructuras iónicas de determinados elementos que actúan como superconductores al ser expuestos a ésta y ya sabemos que el Calcio lo es.
2.3.-El efecto cuántico de las proteínas en el ADN.
Todo lo anterior implica que existe una retroalimentación entre la emisión-recepción y por tanto, las Resonancias Schumann, interactúan igualmente desde dentro hacia fuera. Desde la conciencia hacia la negociación celular y el ADN.
Esta coherencia supone la capacidad de superposición cuántica de ciertas proteinas y al mismo tiempo, explicaría el esquema del desbloqueo de los codones de ADN, realizado por Yumi Kawazoe, Masahito Yamamoto en 2001.
Adicionalmente, tendríamos que:
2.3.-El efecto cuántico de las proteínas en el ADN.
Todo lo anterior implica que existe una retroalimentación entre la emisión-recepción y por tanto, las Resonancias Schumann, interactúan igualmente desde dentro hacia fuera. Desde la conciencia hacia la negociación celular y el ADN.
Esta coherencia supone la capacidad de superposición cuántica de ciertas proteinas y al mismo tiempo, explicaría el esquema del desbloqueo de los codones de ADN, realizado por Yumi Kawazoe, Masahito Yamamoto en 2001.
El esquema implicaría el siguiente proceso:
Adicionalmente, tendríamos que:
Aplicamos las fuerzas de acoplamiento dipolar entre las nubes de electrones de los átomos adyacentes o grupos moleculares. (Efecto Van Der Waals).
Y, por tanto, el modelo encaja con los experimentos de Kool y Guckian, en la medida que verificamos el nexo de enlace con la lógica del Ca, tal y como ya vimos en el enlace con el ión de Calcio, proteínas y su almacenamiento.
Por tanto la relación de almacenamiento de las proteínas sería la siguiente:
En el modelo, el Qbit, constituye por superposición el acoplamiento bipolar.
Y en efecto, la calmodulina y el calcio interactúan intercambiando cargas electromagnéticas. En este punto, la interacción de las estructuras integra moléculas complejas de aminoácidos aromáticos que replican y consolidan los paquetes de información, actuando como auténticos aceleradores de información, o semiconductores.
Las modificaciones de nuestro ADN no sólo pueden ser negativas como acostumbramos a leer en las publicaciones farmacéuticas: “Crecimiento de tumores y proliferación de virus”, sino también positivas: “Inversión de los procesos de enfermedad y estados de hipersalud e hiperlucidez.” Las emociones y su estudio, interactúan claramente en estos procesos, mediante la regulación consciente de los ciclos cerebrales. Las emociones positivas y/o negativas mantenidas en el tiempo, afectan sin duda alguna a nuestro bienestar físico y a largo plazo determinan nuestra configuración genética.
3.-¿Cómo podemos mejorar nuestra salud física y espiritual?
Tenemos la capacidad y la responsabilidad de generar bienestar a los que nos rodean aprendiendo a gestionar nuestras emociones de forma positiva.
El factor emocional es clave en la salud física, mental y espiritual. Una alimentación equilibrada y rica en nutrientes es excepcional para sentirnos bien con nosotros mismos y con los que nos rodean al igual que el ejercicio físico.
Pero igualmente debemos reflexionar sobre algunos hábitos automatizados que nos impiden la gestión satisfactoria de nuestros sentimientos más profundos. En este sentido, generar actitudes proactivas basadas en la reflexión positiva, la amabilidad, las buenas maneras, la asertividad y la espiritualidad, nos permiten activar con la constancia y el tiempo muchas de las funciones y aptitudes que permanecen dormidas en nuestro ADN.
La meditación nos ayuda a relajar los ciclos cerebrales, pero debe ir acompañada de una profunda convicción de nuestro ser como perteneciente a un Universo inteligente del que formamos parte. Es esa aceptación de la trascendencia, la que nos da accceso a la armonía.
Automatizar conductas negativas no es sano, y menos, dejarse abatir por sensaciones de negatividad o decepción. Biofísicamente, tenemos la capacidad de reconciliarnos con nosotros mismos, tomando la responsabilidad activa de la creación que es muchísimo más estimulante y sana.
El Yoga, la música, el contacto con la naturaleza y otras actividades como el deporte, son instrumentos que nos facilitan la comunicación con nuestro ser de luz. Cualquier método nos ayuda en ese sentido, siempre que no olvidemos cuál es el objetivo de nuestra existencia: Alcanzar la felicidad. Lo que científicamente estamos en condiciones de afirmar, es que existe una clara relación entre la correcta gestión de las emociones, el amor, entendido como servicio al otro y la salud, tanto física como espiritual. El estudio de los patrones de la música, los armónicos, las resonancias y las frecuencias, son claves como herramienta de trabajo.
La Psicología Cuántica Diferencial, tiene por finalidad enseñar al individuo a generar sus propios medios de resonancia con el Universo, reduciendo al máximo su dependencia de agentes externos, adicciones y automatismos insanos. La toma de conciencia del yo reconciliado con su ser de luz y feliz, es la clave de la evolución espiritual y requiere un trabajo personal que conlleva la mayor de las recompensas: La activación plena de la conciencia y la gestión eficiente del ser: Aprender a pensar, aprender a sentir y como consecuencia, aprender a comunicarnos con nosotros mismos, con los que nos rodean y con el Universo.
En el Congreso de Radiofrecuiencia y Universo Inteligente que celebrará el IRCAI el próximo día 3 de Julio en Alicante, expondremos detalladamente por primera vez una aproximación empírica transdisciplinar al estudio de la conciencia y presentaremos los últimos descubrimientos desde el análisis de las Resonancias Schumann hacia el ser humano: La relación existente con un rango diferencial de estas Resonancias, que tanto desde la Ionosfera, como desde el individuo, nos conectan con el Universo desencadenando desde dentro de éste, procesos coherentes de negociacion celular, genéticos, bioquímicos que son gestionados mediante las emociones con implicaciones en nuestra conducta, nuestra salud y nuestro proceso espiritual.
Autor: Dr.Rafael López-Guerrero.
Research Director IRCAI.(Instituto Radiofrecuencia Cuántica Avanzada Internacional).http://www.ircai.eu
Bibliografía Recomendada:
1.-Las Bases Científicas del Diferencial König-Guerrero: La Relación Ionogenomática y las Resonancias Schumann. Radiofrecuencia Cuántica Diferencial y análisis de los procesos biofísicos de la conciencia. López-Guerrero,Rafael, Dieter Broers Ernst, Betés de Toro,Mariano, Cahue Gamo,Mila. IRCAI-Departamento de Radiofrecuencia, Neurociencia, Biofísica y Psicología. IRCAISCIC20100703RLG. Junio 2010, Instituto de Radiofrecuencia Cuantica Avanzada Internacional.IRCAI.SL).
3.-El error de Descartes: Damasio, Antonio: La emoción,la razón y el cerebro humano: ISBN:84327876
4.- A mathematical model of agonist-induced propagation of calcium waves in astrocytes. Authors: Roth BJ , Yagodin SV , Holtzclaw L (ISSN: 0143-4160) (ESSN: 1532-1991)[1995 Jan; Volume: 17 (Issue: 1 )].
fuente:Misterios de la Astrofísica.starwiver
miércoles, 18 de agosto de 2010
El Cerebro del Adolescente: Comportamiento, Solucion de Problemas y Toma de Decisiones
Muchos padres no pueden entender por qué sus adolescentes ocasionalmente se comportan de manera impulsiva, irracional o peligrosa. A veces parece que ellos no piensan las cosas a fondo o no consideran las consecuencias de sus acciones. Los adolescentes son diferentes a los adultos en la manera en que se comportan, resuelven problemas y toman decisiones. Hay una explicación biológica para esta diferencia. Estudios han demostrado que el cerebro continúa madurándose y desarrollándose durante la niñez, la adolescencia y hasta principios de la edad adulta.
Los científicos han identificado una región específica del cerebro llamada la amígdala, la cual es responsable de las reacciones instintivas incluyendo el temor y el comportamiento agresivo. Esta región se desarrolla temprano. Sin embargo, la corteza frontal, el área del cerebro que controla el razonamiento y nos ayuda a pensar antes de actuar, se desarrolla más tarde. Esta parte del cerebro va cambiando y madurando hasta bien entrada la edad adulta.
Otros cambios específicos en el cerebro durante la adolescencia incluyen un rápido aumento en las conexiones entre las células del cerebro y el podar (refinamiento) de las vías del cerebro. Las células nerviosas desarrollan mielina, una capa insuladora que ayuda a las células a comunicarse. Todos estos cambios son esenciales para el desarrollo coordinado de pensamiento, acción y comportamiento.
Cambios Cerebrales Quieren Decir que los Adolescentes Actúan de Manera Diferente a los Adultos
Retratos del cerebro en acción muestran que los cerebros de los adolescentes funcionan de manera diferente a los de los adultos cuando toman decisiones y resuelven problemas. Sus acciones son guiadas más por la amígdala y menos por la corteza frontal. Investigaciones también han demostrado que la exposición a drogas y alcohol antes del nacimiento, trauma a la cabeza u otros tipos de lesiones cerebrales pueden interferir con el desarrollo normal del cerebro durante la adolescencia.
Basado en el estado de desarrollo del cerebro, los adolescentes tienden a:
Actuar impulsivamente
Leer mal o malinterpretar las señales sociales y emocionales
Envolverse en toda clase de accidentes
Envolverse en peleas
Participar en comportamiento peligroso y arriesgado.
Los adolescentes tienden a no:
Pensar antes de actuar
Hacer una pausa para considerar las consecuencias potenciales de sus acciones
Modificar sus comportamientos peligrosos o inapropiados.
Estas diferencias en el cerebro no quieren decir que la gente joven no pueda tomar decisiones buenas o sepa diferenciar entre lo correcto y lo incorrecto. Ello también no quiere decir que ellos no deben de ser responsables por sus acciones. Pero, el estar conscientes de estas diferencias puede ayudar a los padres, maestros, abogados y a los que establecen la política, a entender, anticipar y manejar el comportamiento de los adolescentes.
Los científicos han identificado una región específica del cerebro llamada la amígdala, la cual es responsable de las reacciones instintivas incluyendo el temor y el comportamiento agresivo. Esta región se desarrolla temprano. Sin embargo, la corteza frontal, el área del cerebro que controla el razonamiento y nos ayuda a pensar antes de actuar, se desarrolla más tarde. Esta parte del cerebro va cambiando y madurando hasta bien entrada la edad adulta.
Otros cambios específicos en el cerebro durante la adolescencia incluyen un rápido aumento en las conexiones entre las células del cerebro y el podar (refinamiento) de las vías del cerebro. Las células nerviosas desarrollan mielina, una capa insuladora que ayuda a las células a comunicarse. Todos estos cambios son esenciales para el desarrollo coordinado de pensamiento, acción y comportamiento.
Cambios Cerebrales Quieren Decir que los Adolescentes Actúan de Manera Diferente a los Adultos
Retratos del cerebro en acción muestran que los cerebros de los adolescentes funcionan de manera diferente a los de los adultos cuando toman decisiones y resuelven problemas. Sus acciones son guiadas más por la amígdala y menos por la corteza frontal. Investigaciones también han demostrado que la exposición a drogas y alcohol antes del nacimiento, trauma a la cabeza u otros tipos de lesiones cerebrales pueden interferir con el desarrollo normal del cerebro durante la adolescencia.
Basado en el estado de desarrollo del cerebro, los adolescentes tienden a:
Actuar impulsivamente
Leer mal o malinterpretar las señales sociales y emocionales
Envolverse en toda clase de accidentes
Envolverse en peleas
Participar en comportamiento peligroso y arriesgado.
Los adolescentes tienden a no:
Pensar antes de actuar
Hacer una pausa para considerar las consecuencias potenciales de sus acciones
Modificar sus comportamientos peligrosos o inapropiados.
Estas diferencias en el cerebro no quieren decir que la gente joven no pueda tomar decisiones buenas o sepa diferenciar entre lo correcto y lo incorrecto. Ello también no quiere decir que ellos no deben de ser responsables por sus acciones. Pero, el estar conscientes de estas diferencias puede ayudar a los padres, maestros, abogados y a los que establecen la política, a entender, anticipar y manejar el comportamiento de los adolescentes.
El cerebro trabaja más ante una situación de duda que de riesgo
Lo¡sostienen que hay 24 áreas del cerebro que actúan frente a lo imprevisible y no lo hacen igual frente a riesgos conocidos. Y que son las zonas emocionales las que ayudan frente a la incertidumbre.
Gabriel Giubellino.
ggiubellino@clarin.com
Al ser humano no le gustan las incertidumbres. Eso lo sabe cualquiera por experiencia propia. Lo que se desconocía es que su sistema neuronal responde de manera muy distinta cuando se lo enfrenta a distintos niveles de probabilidad. Se activa mucho más ante un resultado imprevisible: 24 áreas del cerebro se ponen a trabajar bajo condiciones de ambigüedad, antes que frente a riesgos conocidos. Son los centros emocionales los que ayudan a lidiar con la incertidumbre. La razón y la emoción van entonces de la mano.
Esta es una conclusión a la que llegaron investigadores de la Escuela Médica de la Universidad de Iowa, y la División de Humanidades y Ciencias Sociales del Instituto California de Tecnología, en Pasadena, Estados Unidos.
En teorías utilizadas en ciencias sociales se considera que las únicas variables que influencian en una evaluación son los juicios sobre los resultados probables, afirma el estudio publicado en la revista Science, de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia.
En algunas elecciones, como jugar a la ruleta, el apostador puede tener en cuenta algunas variables como ciertas frecuencias, u otros antecedentes antes de decidir su jugada. "En el otro extremo, como la chance de un ataque terrorista, las probabilidades están basadas en evidencias exiguas o conflictivas, donde la información importante claramente falta", dice el estudio.
El modelo teórico que explica esta forma de decidir indica que ante una probabilidad imprecisa, la gente se inclina a considerar el peor resultado posible. Se actúa como si del otro lado hubiese un oponente que pueda elegir con maldad lo que desfavorece al participante. Esta es una respuesta emocional. Pero también en ese caso hay una respuesta racional: se estima lo peor, se juzga cuánto paga y entonces se decide.
De esta manera distinguieron dos tipos de incertidumbre: una, llamada riesgosa; la otra, ambigua.
"Las elecciones pueden depender de cuánta información relevante está faltando, o qué tan ignorante se siente la gente comparado con otros", señala el artículo.
Los investigadores focalizaron el estudio en regiones antes asociadas al lado emocional de la toma de decisiones. Combinaron dos fuentes de información: imágenes de resonancia magnética y el estudio de la conducta de pacientes con ciertas lesiones. Ante estímulos que conllevan un alto grado de incertidumbre, las áreas procesadoras de emociones, como la corteza órbitofrontal y la amígdala, se activaron más que frente a estímulos apenas riesgosos. Ambas áreas, conectadas bidireccionalmente, actúan rápidamente como sistemas de "vigilancia" y evaluación.
La investigación demuestra que las situaciones riesgosas y las ambiguas mueven distintas área del cerebro. "Bajo un estado de ambigüedad, el cerebro es alertado de que falta información, y que las elecciones basadas en la información disponible puede por lo tanto tener consecuencias desconocidas y potencialmente peligrosas, y que se deben movilizar recursos cognitivos y conductuales para conseguir información adicional del entorno".
Estas respuestas, observadas en imágenes, fueron corroboradas al estudiar lo que sucede en pacientes con lesiones en la corteza órbitofrontal. No demostraron preferencia por decisiones con riesgo "conocido" por sobre las inciertas.
Lo que hacen estos investigadores es unir el conocimiento de la neurología con el de la economía. Esto lo ha planteado ya un autor del trabajo, Crolin Camerer, en un informe titulado: "Neuroeconomía. Por qué la economía necesita al cerebro". Entonces citó al economista Jacob Viner, quien ya en 1925 decía: "La conducta humana en general y, por lo tanto, presumiblemente también en el mercado, no se encuentra bajo la detallada y constante orientación de hedónicos cálculos exactos y cuidadosos, sino que es producto de un inestable e irracional complejo de acciones reflexivas, impulsos, instintos, hábitos, costumbres, modas e histeria".
En otro siglo, 80 años después, los científicos salieron a corroborarlo. Aldo Rustichini, investigador en teoría de la decisión en la Universidad de Minnesota, Minneapolis, explica esta aversión a la ambigüedad con una experiencia similar a la realizada en esta investigación. Se colocan dos mazos de cartas en una mesa. El de la derecha tiene 50 cartas rojas y 50 azules. El de la izquierda también tiene cartas rojas y azules, pero el conejillo no conoce cuántas de cada una. El investigador toma una carta de cada mazo. Promete darle 100 dólares al participante si acierta el color.
¿A cuál apuesta la mayoría? Al mazo de la derecha. Y la más pura lógica indica que en el otro mazo también hay un 50 y 50 de posibilidades de ganar y perder.
La diferencia es que se apuesta al mazo "conocido", esto es, del que se "conoce la probabilidad". En ese artículo se dice que este razonamiento se emplea cuando se evalúa la relación entre el precio de un producto de una compañía conocida ante otro precio —más barato— de un producto similar, pero de una empresa desconocida. "La gente le gusta más aquello que conoce", afirma Rustichini.
La relación de este tipo de investigaciones con la economía es evidente. Dos sectores importantes de ella, como el negocio del juego y el del seguro, se basan en la consideración de situaciones riesgosas. El estudio menciona incluso otras áreas delicadas sobre la toma de decisiones, como el combate al terrorismo.
"Dilucidar los procesos neurales de la toma de decisiones humanas ayudará a entender las importantes diferencias económicas entre riesgo y ambigüedad", dijo el doctor Facundo Manes, director del Instituto de Neurologia Cognitiva (INECO). "Los experimentos demuestran que mucha gente prefiere apostar en situaciones riesgosas o peligrosas antes que en ambiguas".
Es evidencia científica de un refrán que bien podría haber sido de cabecera de Sancho Panza: "Mejor malo conocido que bueno por conocer".
Gabriel Giubellino.
ggiubellino@clarin.com
Al ser humano no le gustan las incertidumbres. Eso lo sabe cualquiera por experiencia propia. Lo que se desconocía es que su sistema neuronal responde de manera muy distinta cuando se lo enfrenta a distintos niveles de probabilidad. Se activa mucho más ante un resultado imprevisible: 24 áreas del cerebro se ponen a trabajar bajo condiciones de ambigüedad, antes que frente a riesgos conocidos. Son los centros emocionales los que ayudan a lidiar con la incertidumbre. La razón y la emoción van entonces de la mano.
Esta es una conclusión a la que llegaron investigadores de la Escuela Médica de la Universidad de Iowa, y la División de Humanidades y Ciencias Sociales del Instituto California de Tecnología, en Pasadena, Estados Unidos.
En teorías utilizadas en ciencias sociales se considera que las únicas variables que influencian en una evaluación son los juicios sobre los resultados probables, afirma el estudio publicado en la revista Science, de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia.
En algunas elecciones, como jugar a la ruleta, el apostador puede tener en cuenta algunas variables como ciertas frecuencias, u otros antecedentes antes de decidir su jugada. "En el otro extremo, como la chance de un ataque terrorista, las probabilidades están basadas en evidencias exiguas o conflictivas, donde la información importante claramente falta", dice el estudio.
El modelo teórico que explica esta forma de decidir indica que ante una probabilidad imprecisa, la gente se inclina a considerar el peor resultado posible. Se actúa como si del otro lado hubiese un oponente que pueda elegir con maldad lo que desfavorece al participante. Esta es una respuesta emocional. Pero también en ese caso hay una respuesta racional: se estima lo peor, se juzga cuánto paga y entonces se decide.
De esta manera distinguieron dos tipos de incertidumbre: una, llamada riesgosa; la otra, ambigua.
"Las elecciones pueden depender de cuánta información relevante está faltando, o qué tan ignorante se siente la gente comparado con otros", señala el artículo.
Los investigadores focalizaron el estudio en regiones antes asociadas al lado emocional de la toma de decisiones. Combinaron dos fuentes de información: imágenes de resonancia magnética y el estudio de la conducta de pacientes con ciertas lesiones. Ante estímulos que conllevan un alto grado de incertidumbre, las áreas procesadoras de emociones, como la corteza órbitofrontal y la amígdala, se activaron más que frente a estímulos apenas riesgosos. Ambas áreas, conectadas bidireccionalmente, actúan rápidamente como sistemas de "vigilancia" y evaluación.
La investigación demuestra que las situaciones riesgosas y las ambiguas mueven distintas área del cerebro. "Bajo un estado de ambigüedad, el cerebro es alertado de que falta información, y que las elecciones basadas en la información disponible puede por lo tanto tener consecuencias desconocidas y potencialmente peligrosas, y que se deben movilizar recursos cognitivos y conductuales para conseguir información adicional del entorno".
Estas respuestas, observadas en imágenes, fueron corroboradas al estudiar lo que sucede en pacientes con lesiones en la corteza órbitofrontal. No demostraron preferencia por decisiones con riesgo "conocido" por sobre las inciertas.
Lo que hacen estos investigadores es unir el conocimiento de la neurología con el de la economía. Esto lo ha planteado ya un autor del trabajo, Crolin Camerer, en un informe titulado: "Neuroeconomía. Por qué la economía necesita al cerebro". Entonces citó al economista Jacob Viner, quien ya en 1925 decía: "La conducta humana en general y, por lo tanto, presumiblemente también en el mercado, no se encuentra bajo la detallada y constante orientación de hedónicos cálculos exactos y cuidadosos, sino que es producto de un inestable e irracional complejo de acciones reflexivas, impulsos, instintos, hábitos, costumbres, modas e histeria".
En otro siglo, 80 años después, los científicos salieron a corroborarlo. Aldo Rustichini, investigador en teoría de la decisión en la Universidad de Minnesota, Minneapolis, explica esta aversión a la ambigüedad con una experiencia similar a la realizada en esta investigación. Se colocan dos mazos de cartas en una mesa. El de la derecha tiene 50 cartas rojas y 50 azules. El de la izquierda también tiene cartas rojas y azules, pero el conejillo no conoce cuántas de cada una. El investigador toma una carta de cada mazo. Promete darle 100 dólares al participante si acierta el color.
¿A cuál apuesta la mayoría? Al mazo de la derecha. Y la más pura lógica indica que en el otro mazo también hay un 50 y 50 de posibilidades de ganar y perder.
La diferencia es que se apuesta al mazo "conocido", esto es, del que se "conoce la probabilidad". En ese artículo se dice que este razonamiento se emplea cuando se evalúa la relación entre el precio de un producto de una compañía conocida ante otro precio —más barato— de un producto similar, pero de una empresa desconocida. "La gente le gusta más aquello que conoce", afirma Rustichini.
La relación de este tipo de investigaciones con la economía es evidente. Dos sectores importantes de ella, como el negocio del juego y el del seguro, se basan en la consideración de situaciones riesgosas. El estudio menciona incluso otras áreas delicadas sobre la toma de decisiones, como el combate al terrorismo.
"Dilucidar los procesos neurales de la toma de decisiones humanas ayudará a entender las importantes diferencias económicas entre riesgo y ambigüedad", dijo el doctor Facundo Manes, director del Instituto de Neurologia Cognitiva (INECO). "Los experimentos demuestran que mucha gente prefiere apostar en situaciones riesgosas o peligrosas antes que en ambiguas".
Es evidencia científica de un refrán que bien podría haber sido de cabecera de Sancho Panza: "Mejor malo conocido que bueno por conocer".
La actividad neuronal del cerebro permite predecir la toma de decisiones
Todos los factores que influyen en la toma de decisiones: los recuerdos, situación actual, expectativas, valores o los costes-beneficios que acarrean, están representados en la actividad neuronal, según experto
Estudios realizados con primates han puesto de manifiesto que la observación de la actividad neuronal permite conocer con antelación la decisión que se va a adoptar, lo que permitirá comprender qué alteraciones están detrás de patologías como la psicosis o la esquizofrenia.
Este es uno de los resultados analizados en un curso sobre "Fundamentos Moleculares de la Medicina" realizado por la Real Academia Nacional de Medicina de España.
El director del curso, Enrique Blázquez, indicó que la "estructura molecular del cerebro es la base fundamental e imprescindible para que se puedan realizar todas las funciones cerebrales".
"A través de ella es posible la comunicación interneuronal que capacita la recepción, integración o envío de señales, y de esta forma generar en distintas áreas cerebrales actividades motoras, sensoriales, conductuales, emociones y muchas otras", agregó.
Respecto al proceso de toma de decisiones, el profesor Carlos Acuña, del Departamento de Fisiología de la Facultad de Medicina de Santiago de Compostela, señaló que la actividad cerebral "precede al momento en que se toma una decisión".
"Todos los factores que influyen en la toma de decisiones, como son los recuerdos, la situación actual, las expectativas, los valores o los costes-beneficios que acarrean, están representados en la actividad neuronal", indicó.
Según el profesor de Fisiología, ante un escenario de múltiples posibilidades el ser humano va descartando hasta quedarse sólo con dos.
"Desde el punto de vista morfológico se conoce básicamente todo el cerebro, pero desde el molecular aún queda mucho por estudiar", señaló Juan Bernal, del Instituto de Investigaciones Biomédicas del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y participante en el curso.
Así, se calcula que hay entre 1000 y 10.000 tipos neuronales distintos en el sistema nervioso y la mayoría de ellos, todavía por definir.
El especialista precisó que el objetivo es llegar a conocer este sistema desde la biología de sistemas basándose en la expresión de los genes.
"Conocemos la secuencia del genoma, y la expresión de muchos genes es decir, qué genes se expresan en determinadas estructuras, pero otra cosa es conocer cómo están interrelacionados funcionalmente", concluyó Bernal. E
Estudios realizados con primates han puesto de manifiesto que la observación de la actividad neuronal permite conocer con antelación la decisión que se va a adoptar, lo que permitirá comprender qué alteraciones están detrás de patologías como la psicosis o la esquizofrenia.
Este es uno de los resultados analizados en un curso sobre "Fundamentos Moleculares de la Medicina" realizado por la Real Academia Nacional de Medicina de España.
El director del curso, Enrique Blázquez, indicó que la "estructura molecular del cerebro es la base fundamental e imprescindible para que se puedan realizar todas las funciones cerebrales".
"A través de ella es posible la comunicación interneuronal que capacita la recepción, integración o envío de señales, y de esta forma generar en distintas áreas cerebrales actividades motoras, sensoriales, conductuales, emociones y muchas otras", agregó.
Respecto al proceso de toma de decisiones, el profesor Carlos Acuña, del Departamento de Fisiología de la Facultad de Medicina de Santiago de Compostela, señaló que la actividad cerebral "precede al momento en que se toma una decisión".
"Todos los factores que influyen en la toma de decisiones, como son los recuerdos, la situación actual, las expectativas, los valores o los costes-beneficios que acarrean, están representados en la actividad neuronal", indicó.
Según el profesor de Fisiología, ante un escenario de múltiples posibilidades el ser humano va descartando hasta quedarse sólo con dos.
"Desde el punto de vista morfológico se conoce básicamente todo el cerebro, pero desde el molecular aún queda mucho por estudiar", señaló Juan Bernal, del Instituto de Investigaciones Biomédicas del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y participante en el curso.
Así, se calcula que hay entre 1000 y 10.000 tipos neuronales distintos en el sistema nervioso y la mayoría de ellos, todavía por definir.
El especialista precisó que el objetivo es llegar a conocer este sistema desde la biología de sistemas basándose en la expresión de los genes.
"Conocemos la secuencia del genoma, y la expresión de muchos genes es decir, qué genes se expresan en determinadas estructuras, pero otra cosa es conocer cómo están interrelacionados funcionalmente", concluyó Bernal. E
miércoles, 11 de agosto de 2010
¿Una bacteria que nos hace inteligentes?
l contacto con una bacteria que vive en la tierra parece mejorar el aprendizaje y reducir la ansiedad, afirma un estudio llevado a cabo con ratones Según científicos en Estados Unidos, los animales que tuvieron contacto con este patógeno —Mycobacterium vaccae— mostraron mejor capacidad para aprender nuevas tarea y mayores niveles de serotonina, el compuesto químico cerebral vinculado al estado de ánimo.
La M. vaccae “es una bacteria que vive en la tierra y es probable que la gente la ingiera o respire cuando pasa algún tiempo conviviendo con la naturaleza”, afirma la doctora Dorothy Matthews, profesora de The Sage Colleges en Troy, Nueva York, quien dirigió el estudio.
Mejor aprendizaje, menos ansiedad
Estudios en el pasado habían mostrado que la M. vaccae, inyectada en ratones, lograba estimular el crecimiento de algunas neuronas provocando una mejora en los niveles de serotonina y una reducción de la ansiedad.
Como se sabe también que la serotonina podría tener un papel en el aprendizaje los científicos decidieron investigar si la M. vaccae podría mejorar la inteligencia.
Con ese fin, la doctora Matthews condujo una serie de experimentos con dos grupos de ratones, uno había ingerido la bacteria viva y el otro no había tenido contacto con el patógeno, y estudiaron la capacidad de los animales para trasladarse por un laberinto.
Encontramos que los ratones alimentados con M. vaccae viva navegaron por el laberinto dos veces más rápido y con menos ansiedad que los ratones del otro grupo”, dice la investigadora.
En un segundo experimento los científicos retiraron la bacteria de la dieta de los ratones y se volvió a estudiar su conducta en el laberinto.
Aunque los ratones corrieron por el laberinto más lentamente que cuando habían ingerido la bacteria, en promedio corrieron más rápido que los ratones que no habían consumido el microbio, dicen los investigadores.
“Creemos que estos resultados son importantes porque sugieren una relación entre los microbios y la función cerebral”, dijo a la BBC la doctora Matthews.
Hotel de microbios
De hecho, esto tiene sentido si pensamos en la forma como evolucionamos como humanos que solíamos pasar gran parte del tiempo cazando e interactuando con la naturaleza”.
“Los humanos somos un ‘hotel microbiano’ ya que contamos con unos 10 microbios por cada célula que tenemos en nuestro cuerpo, o sea compartimos nuestro organismo con trillones de microbios”, dice la científica.
La investigadora cree que aunque el nuevo estudio fue llevado a cabo en ratones, podría especularse que pasar tiempo en el exterior donde está presente la M. vaccae podría tener también un impacto positivo en humanos.
De cualquier forma, expresa la investigadora, son bien conocidos los efectos positivos de pasar tiempo en contacto con la naturaleza.
“Así que el mensaje para la gente es salga al exterior, interactúe con la tierra, porque quizás esto lo podrá beneficiar de formas que nunca se imaginó”, afirma la científica.
La investigación fue presentada durante la conferencia anual de la Sociedad Estadounidense de Microbiología que se celebra en San Diego, California.
Fuente: BBC Mundo. Aportado por Eduardo J. Carletti
La M. vaccae “es una bacteria que vive en la tierra y es probable que la gente la ingiera o respire cuando pasa algún tiempo conviviendo con la naturaleza”, afirma la doctora Dorothy Matthews, profesora de The Sage Colleges en Troy, Nueva York, quien dirigió el estudio.
Mejor aprendizaje, menos ansiedad
Estudios en el pasado habían mostrado que la M. vaccae, inyectada en ratones, lograba estimular el crecimiento de algunas neuronas provocando una mejora en los niveles de serotonina y una reducción de la ansiedad.
Como se sabe también que la serotonina podría tener un papel en el aprendizaje los científicos decidieron investigar si la M. vaccae podría mejorar la inteligencia.
Con ese fin, la doctora Matthews condujo una serie de experimentos con dos grupos de ratones, uno había ingerido la bacteria viva y el otro no había tenido contacto con el patógeno, y estudiaron la capacidad de los animales para trasladarse por un laberinto.
Encontramos que los ratones alimentados con M. vaccae viva navegaron por el laberinto dos veces más rápido y con menos ansiedad que los ratones del otro grupo”, dice la investigadora.
En un segundo experimento los científicos retiraron la bacteria de la dieta de los ratones y se volvió a estudiar su conducta en el laberinto.
Aunque los ratones corrieron por el laberinto más lentamente que cuando habían ingerido la bacteria, en promedio corrieron más rápido que los ratones que no habían consumido el microbio, dicen los investigadores.
“Creemos que estos resultados son importantes porque sugieren una relación entre los microbios y la función cerebral”, dijo a la BBC la doctora Matthews.
Hotel de microbios
De hecho, esto tiene sentido si pensamos en la forma como evolucionamos como humanos que solíamos pasar gran parte del tiempo cazando e interactuando con la naturaleza”.
“Los humanos somos un ‘hotel microbiano’ ya que contamos con unos 10 microbios por cada célula que tenemos en nuestro cuerpo, o sea compartimos nuestro organismo con trillones de microbios”, dice la científica.
La investigadora cree que aunque el nuevo estudio fue llevado a cabo en ratones, podría especularse que pasar tiempo en el exterior donde está presente la M. vaccae podría tener también un impacto positivo en humanos.
De cualquier forma, expresa la investigadora, son bien conocidos los efectos positivos de pasar tiempo en contacto con la naturaleza.
“Así que el mensaje para la gente es salga al exterior, interactúe con la tierra, porque quizás esto lo podrá beneficiar de formas que nunca se imaginó”, afirma la científica.
La investigación fue presentada durante la conferencia anual de la Sociedad Estadounidense de Microbiología que se celebra en San Diego, California.
Fuente: BBC Mundo. Aportado por Eduardo J. Carletti
La luz hace crecer las neuronas
n trabajo experimental de regeneración neuronal logra el desarrollo de axones
A las neuronas les atrae la luz. Sin tocar la neurona, como si se tratase de un encantador de serpientes, un minúsculo rayo de luz láser logra estimular el crecimiento de su axón, la terminación que se encarga de conectar con otras neuronas y establecer sinapsis. El juego de seducción entre el láser y la neurona no acaba aquí. También logra guiarla en la dirección deseada. Aunque suene a ciencia ficción, investigadores del Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO) y del Institut de Recerca Biomédica de Barcelona (IRB) acaban de comprobarlo in vitro con neuronas tomadas de un embrión de ratón. Todavía es investigación básica, pero la alianza entre la física y la biología, la biofotónica, abre una nueva vía de investigación para la regeneración neuronal.
Cuando la médula espinal o el cerebro han quedado dañados por alguna enfermedad o traumatismo, como ocurre con un ictus o con la paraplejia, las neuronas de la zona afectada pierden su capacidad para crecer o entran en un proceso de muerte celular. En definitiva, les resulta imposible restablecer las conexiones que serían necesarias para que el sistema nervioso funcione correctamente. Encontrar mecanismos que estimulen el crecimiento de las neuronas y les indiquen el camino a seguir para volver a establecer estas conexiones, es decir la sinapsis, es uno de los grandes retos de la medicina.
Los investigadores del Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO) y del Institut de Recerca Biomédica de Barcelona (IRB) han demostrado que este poder de atracción de la luz láser sobre la neurona existe. Para trabajar bajo las reglas de un mundo de dimensiones minúsculas, han utilizando técnicas de microscopía multifotónica. A una distancia discreta del cuerpo de la neurona en desarrollo y sin tocarla, han situado un complejo y potente haz de luz láser altamente concentrado (una micra de diámetro contiene millones de fotones) que funciona con pulsos ultracortos, es decir, que se enciende y se apaga 80 millones de veces en un segundo.
El efecto del láser durante un tiempo prolongado, unas 3 horas, logra que del cuerpo de la neurona crezca gradualmente un axón completo en la dirección que le va marcando la luz. Los investigadores lo han registrado en un video.
¿Podría ser útil para la regeneración neuronal? Físicos y neurobiólogos han unido esfuerzos para averiguar qué hay detrás de esta reacción y si puede tener alguna aplicación. "Hemos visto que los filopodios, que son las pequeñas ramificaciones al final del axón que exploran el entorno para decidir hacia dónde crecer, buscan el haz de luz; sería como poner un anzuelo para atraerlas", explica Pablo Loza-Álvarez, investigador del ICFO.
Aunque todavía no se conoce la maquinaria celular que puede haber detrás de ello, existen hipótesis basadas en ensayos anteriores con otras líneas celulares. No es la primera vez que se utiliza luz láser para manipular células. Un equipo de físicos de la Universidad de Texas publicó en el 2002 en Proceedings of the National Academy of Sciences que había logrado resultados similares pero con otra línea celular, las PC-12, una célula que se utiliza como modelo de neuronas, aunque no lo son. Así pues, el equipo de científicos españoles es el primero que lo ha logrado con neuronas.
"Una neurona y su axón no crecen por sí solos, sino que es necesaria la activación de una serie de proteínas y señales que al final son las responsables de la extensión de la membrana y el crecimiento del axón", explica Eduardo Soriano, responsable del grupo de investigación en neurobiología del desarrollo y de la regeneración del IRB, también implicado en el proyecto.
El primer paso de su investigación será caracterizar la maquinaria del axón que es activada por la luz láser, "expondremos la neurona a la luz láser e iremos diseccionando la maquinaria celular de la neurona que es imprescindible para el guiado", explica Soriano.
Durante el desarrollo cerebral, para que funcione toda esta maquinaria de crecimiento la neurona también recibe órdenes externas que funcionan como señales atrayentes o como señales stop. Las moléculas que atraen químicamente a la neurona producen cambios en el citoesqueleto y en la membrana del axón, que hacen que las fibras crezcan y se estiren en la dirección de crecimiento. "Cuando ocurre una lesión neuronal, sea por un accidente traumático o por cualquier otra causa clínica, esta maquinaria de proteínas necesaria para el crecimiento está desactivada", añade.
La segunda fase de la investigación consistirá, pues, en determinar si el efecto del láser sobre las neuronas puede sustituir las funciones de este grupo de moléculas quimioatractivas que quedan dañadas cuando hay una lesión neuronal. "Si el láser puede atraer neuronas, es lógico pensar que puede modificar la maquinaria del citoesqueleto y las membranas, de forma similar a las moléculas quimioatractivas", aclara el investigador.
Si los resultados son positivos, el siguiente paso, aunque todavía lejos, "será traspasar este modelo a neuronas que no crezcan, que no se regeneran, para ver si también puede guiar axones lesionados maduros", explica Soriano. Si lo lograsen, "podría ser de interés en un futuro para formar nuevas conexiones sinápticas, para tratar enfermedades como lesiones en la médula espinal en que se seccionan axones y en la regeneración del sistema nervioso periférico", explica Loza-Álvarez.
En este sentido, el potencial es amplio. "Puede ser que nos permita detectar nuevos mecanismo y por tanto nuevas dianas terapéuticas, o a más largo plazo, desarrollar algún tipo de tecnología para utilizar directamente el láser sobre la zona lesionada y restablecer las conexiones entre neuronas, algo que en una primera instancia parecería viable en lesiones del sistema nervioso periférico por ser más accesibles", explican los investigadores. De momento, habrá que continuar investigando.
Para José María Tormos, coordinador de investigación del Instituto Guttmann de Badalona, "todas estas investigaciones son esperanzadoras, aunque seguramente la clave está en combinar las diferentes intervenciones sobre las que en estos momentos se está investigando. El guiado óptico de neuronas es posible que sea una herramienta más para modular la capacidad plástica del sistema nervioso".
Fuente: Mónica L. Ferrado para ElPais.com. Aportado por Graciela Lorenzo Tillard
Superalimentos del futuro
uperalimentos del futuro
Quizás muy pronto comencemos a ver en nuestros supermercados una nueva generación de alimentos altamente nutritivos capaces de fortalecer la salud de los consumidores.
(BBC Mundo) - Uno de estos alimentos que habrá en el futuro es el queso probiótico, desarrollado por los científicos del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) en Argentina, elaborado con un alto contenido de bacterias probióticas.
Tal como dijo a BBC Mundo el doctor Jorge Reinheimer, director del proyecto, "este producto es mucho más que un alimento, y es el primer queso probiótico que se desarrolla en América Latina".
Beneficios
Los productos probióticos aparecieron por primera vez en el mundo en la década de los 90 y hoy en día existen varios ejemplos de yogures que ya han demostrado sus beneficios nutricionales.
Pero la elaboración de los quesos probióticos es mucho más complicada, ya que apenas comienza a desarrollarse la tecnología.
Inicialmente este medicamento-alimento fue recomendado para personas que padecen alguna deficiencia en el sistema inmunológico, pero ahora se conocen ya otro tipo de beneficios como la producción de vitaminas, la protección contra infecciones e, incluso, la prevención del cáncer.
"Un alimento probiótico está elaborado con un alto número de bacterias específicas que influyen positivamente en la salud del consumidor", señala Jorge Reinheimer.
Cuando la persona ingiere el producto, las bacterias llegan vivas al intestino grueso, pueden instalarse y sobrevivir en el tracto intestinal y desde allí ejercer todo tipo de efectos beneficiosos para la salud del individuo.
"Los efectos que ejercen estas bacterias una vez que se instalan en el intestino son variados", señala Jorge Reinheimer.
"Son capaces de estimular el sistema inmunológico, aumentando las defensas del organismo contra infecciones de virus o bacterias, reducen el nivel de colesterol en la sangre, son capaces de disminuir la duración de diarreas, particularmente en el caso de niños", dice.
"Y a través de ensayos realizados en ratones, se ha visto que estas bacterias tienen una actividad antitumoral que podría ayudar para prevenir el desarrollo de cáncer", agrega.
Superalimentos
Estos productos "supersanos" son, en realidad, un alimento tradicional enriquecido con bacterias probióticas y, tal como señalan los investigadores, en el futuro los consumidores estaremos mucho más habituados a consumir este tipo de bioalimentos.
Y lo principal es que estarán al alcance de los consumidores.
"En estos momentos en Argentina la mayoría de los yogures que se ven en el supermercado son yogures probióticos", dice Reinheimer "y el costo sólo es ligeramente superior al de un yogur tradicional".
Por el momento, los cultivos de bacterias probióticas que se utilizan en la elaboración de bioalimentos deben ser importados a Argentina, pero cuando esos cultivos puedan producirse en el país, los costos disminuirán.
Y tal como señala Reinheimer, aunque todas las personas pueden gozar de los beneficios nutricionales de los bioalimentos, éstos serán una herramienta particularmente útil para las poblaciones infantiles de bajos recursos, víctimas de las mayores amenazas a la salud en América Latina: la desnutrición y la diarrea.
¿Podemos usar metilfenidato (Ritalina) para estimular el cerebro?
Dice un experto británico: “La gente sana debería poder tomar el fármaco que se receta contra la hiperactividad en los niños, el metilfenidato (conocido comercialmente como ritalina), para mejorar sus capacidades cerebrales”
Ésa es la afirmación de un experto en bioética británico, el profesor John Harris de la Universidad de Machester, en un artículo publicado en British Medical Journal (Revista Médica Británica). El científico, que es también editor en jefe de Journal of Medical Ehtics (Revista de Ética Médica) afirma que si el medicamento es seguro para los niños, los adultos también deberían poder tomarlo.
El metilfenidato es un psicoestimulante desarrollado en los 1950 para el tratamiento del Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) en los niños. El fármaco es utilizado cada vez más, principalmente en Estados Unidos.
Muchos médicos recetan la ritalina a los niños que se les ha diagnosticado TDAH porque dicen que ésta puede ayudarles a controlar su comportamiento y a funcionar mejor tanto en su casa como en la escuela. Y en años recientes han surgido informes de que está siendo ampliamente utilizado entre adultos, principalmente estudiantes, para mejorar sus capacidades mentales.
Los comentarios del profesor Harris, sin embargo, han provocado críticas de quienes se oponen al uso de estos medicamentos para la estimulación cerebral, cuya venta sin receta médica es ilegal en muchos países, incluido el Reino Unido. En este país el fármaco está clasificado como clase B, lo que significa que su posesión sin receta médica puede conducir a hasta cinco años en prisión y venderla a una sentencia de hasta 14 años tras las rejas.
“Sol sintético”
El profesor John Harris afirma que los beneficios de la ritalina incluyen una mejora en la capacidad para estudiar y concentrarse. Expresa que “no sería ético” evitar que la gente sana tome el fármaco ya que hay evidencia de que puede utilizarse con seguridad. Y agrega que “ser seguro quiere decir que es lo “suficientemente” seguro; ya que no existen medicamentos que sean libres de efectos secundarios, esto quiere decir que el consumidor ya ha juzgado los riesgos de estos efectos y ha considerado que vale la pena tomarlo, dados los probables beneficios”.
Según el científico, si durante años los niños han tomado de forma segura la ritalina para un trastorno que usualmente no conlleva un riesgo de muerte, no hay razón para evitar que los adultos sanos también la utilicen. “No es racional —dice John Harris— ir en contra del mejoramiento humano”. Y compara el uso de medicinas para mejorar el poder cerebral al uso del llamado “sol sintético”, la luz que producen las lámparas, el fuego y la electricidad.
“Antes de este sol sintético la gente dormía cuando oscurecía y trabajaba con la luz del día”. “Con la llegada del sol sintético, la vida social y de trabajo pudo continuar hasta entrada la noche creando presiones competitivas e incentivos para los que eran capaces o deseaban utilizar las ventajas de este nuevo orden”, expresa.
Bajo presión
No todos los expertos, sin embargo, están de acuerdo. En la misma publicación y en respuesta a los comentarios del profesor Harris, Anjan Chatterjee, profesor de neurología de la Universidad de Pensilvania afirma que, a menos que la persona esté en realidad enferma, el consumo de ritalina conlleva demasiados riesgos.
El investigador explica que en Estados Unidos la Administración para Alimentos y Fármacos (FDA) ha clasificado a la medicina con una “caja negra” —que es la más peligrosa de las advertencias— por su alto potencial para abuso, dependencia, riesgo de muerte súbita y graves efectos adversos para el corazón.
El científico afirma que el consumo de ritalina conlleva riesgos cognitivos como la pérdida de creatividad.
“Ser listo no significa ser más sabio” expresa el profesor Chatterjee y cuestiona la posibilidad de que los niños en escuelas preparatorias tomen ritalina en “proporciones epidémicas” o cuando los trabajadores como pilotos, oficiales de policía y médicos de guardia se sientan bajo presión de tomar ritalina para funcionar mejor.
“Apoyar ahora el uso legal y no terapéutico del metilfenidato y de otros estimulantes cognitivos es prematuro” expresa el experto. “Necesitamos investigar adecuadamente la eficacia y los riesgos de los estimulantes en personas sanas y esta información necesita ser diseminada ampliamente.
“Hasta que se lleven a cabo estas investigaciones, no es aceptable recomendar que las personas sanas tomen fármacos para mejorar su rendimiento cerebral” señala el profesor Chatterjee.
Fuente: BBC Mundo. Aportado por Eduardo J. Carletti
Ésa es la afirmación de un experto en bioética británico, el profesor John Harris de la Universidad de Machester, en un artículo publicado en British Medical Journal (Revista Médica Británica). El científico, que es también editor en jefe de Journal of Medical Ehtics (Revista de Ética Médica) afirma que si el medicamento es seguro para los niños, los adultos también deberían poder tomarlo.
El metilfenidato es un psicoestimulante desarrollado en los 1950 para el tratamiento del Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) en los niños. El fármaco es utilizado cada vez más, principalmente en Estados Unidos.
Muchos médicos recetan la ritalina a los niños que se les ha diagnosticado TDAH porque dicen que ésta puede ayudarles a controlar su comportamiento y a funcionar mejor tanto en su casa como en la escuela. Y en años recientes han surgido informes de que está siendo ampliamente utilizado entre adultos, principalmente estudiantes, para mejorar sus capacidades mentales.
Los comentarios del profesor Harris, sin embargo, han provocado críticas de quienes se oponen al uso de estos medicamentos para la estimulación cerebral, cuya venta sin receta médica es ilegal en muchos países, incluido el Reino Unido. En este país el fármaco está clasificado como clase B, lo que significa que su posesión sin receta médica puede conducir a hasta cinco años en prisión y venderla a una sentencia de hasta 14 años tras las rejas.
“Sol sintético”
El profesor John Harris afirma que los beneficios de la ritalina incluyen una mejora en la capacidad para estudiar y concentrarse. Expresa que “no sería ético” evitar que la gente sana tome el fármaco ya que hay evidencia de que puede utilizarse con seguridad. Y agrega que “ser seguro quiere decir que es lo “suficientemente” seguro; ya que no existen medicamentos que sean libres de efectos secundarios, esto quiere decir que el consumidor ya ha juzgado los riesgos de estos efectos y ha considerado que vale la pena tomarlo, dados los probables beneficios”.
Según el científico, si durante años los niños han tomado de forma segura la ritalina para un trastorno que usualmente no conlleva un riesgo de muerte, no hay razón para evitar que los adultos sanos también la utilicen. “No es racional —dice John Harris— ir en contra del mejoramiento humano”. Y compara el uso de medicinas para mejorar el poder cerebral al uso del llamado “sol sintético”, la luz que producen las lámparas, el fuego y la electricidad.
“Antes de este sol sintético la gente dormía cuando oscurecía y trabajaba con la luz del día”. “Con la llegada del sol sintético, la vida social y de trabajo pudo continuar hasta entrada la noche creando presiones competitivas e incentivos para los que eran capaces o deseaban utilizar las ventajas de este nuevo orden”, expresa.
Bajo presión
No todos los expertos, sin embargo, están de acuerdo. En la misma publicación y en respuesta a los comentarios del profesor Harris, Anjan Chatterjee, profesor de neurología de la Universidad de Pensilvania afirma que, a menos que la persona esté en realidad enferma, el consumo de ritalina conlleva demasiados riesgos.
El investigador explica que en Estados Unidos la Administración para Alimentos y Fármacos (FDA) ha clasificado a la medicina con una “caja negra” —que es la más peligrosa de las advertencias— por su alto potencial para abuso, dependencia, riesgo de muerte súbita y graves efectos adversos para el corazón.
El científico afirma que el consumo de ritalina conlleva riesgos cognitivos como la pérdida de creatividad.
“Ser listo no significa ser más sabio” expresa el profesor Chatterjee y cuestiona la posibilidad de que los niños en escuelas preparatorias tomen ritalina en “proporciones epidémicas” o cuando los trabajadores como pilotos, oficiales de policía y médicos de guardia se sientan bajo presión de tomar ritalina para funcionar mejor.
“Apoyar ahora el uso legal y no terapéutico del metilfenidato y de otros estimulantes cognitivos es prematuro” expresa el experto. “Necesitamos investigar adecuadamente la eficacia y los riesgos de los estimulantes en personas sanas y esta información necesita ser diseminada ampliamente.
“Hasta que se lleven a cabo estas investigaciones, no es aceptable recomendar que las personas sanas tomen fármacos para mejorar su rendimiento cerebral” señala el profesor Chatterjee.
Fuente: BBC Mundo. Aportado por Eduardo J. Carletti
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